Abundancia emocional
Las emociones son la clave de la abundancia. Las Constelaciones Familiares explican que las emociones son el motor y la fuerza que utiliza nuestro pensamiento para poder llevar las creencias que tenemos en nuestra mente a la acción.
La abundancia y la riqueza se logran concretar cuando nuestra emociones están alineadas, en armonía, cuando nuestra mente y ser están serenos y en paz, viviendo el aquí y el ahora. Entonces, si hay fluidez en las emociones la abundancia va a llegar a nosotros.
Existen unos órdenes que rigen a la abundancia, y que deben estar en su lugar para poder percibirla:
- El agradecimiento: la prosperidad llega sola cuando agradecemos a la vida tal y como es.
- Aceptar las cosas tales como son: tomar a las personas y a las cosas tales como son. Formar activamente del dar y recibir de manera equilibrada. Al lograr esto, nuestro entorno nos lo retribuye y agradece con la abundancia.
- Aceptar a la madre: cuando aceptamos a nuestra madre tal y como es, con lo que nos dio y lo que no nos pudo dar. Cuando la aceptamos sin juzgar, sin rencor y desde el amor, a partir de ahí es que podremos alcanzar la abundancia y el éxito.
- Aceptar al padre: aceptar a nuestro padre tal y como es. Tomarlo y agradecerle por lo que nos dio, así haya sido mucho o poco, pero siempre desde el amor y alejados del rencor y los prejuicios nos permitirá concretar nuestros planes. Aceptar a nuestros dos padres es lo que nos va a permitir percibir la abundancia.
- Poner orden en el sistema familiar: en artículos anteriores hablamos sobre los órdenes del amor. Para la abundancia es muy importante que estos órdenes estén alineados, en su lugar. Si no respetamos la pertenencia de un miembro dentro de la familia, sino que hay exclusión; si no hay una jerarquía, sino que tomamos puestos que no nos corresponden, y si no hay equilibrio entre el dar y el recibir, no podemos exigir abundancia y algo que nos corresponde por herencia porque no hay equilibrio entre lo que debería ser.
- Dar y recibir: mantener un equilibrio entre estos dos aspectos es la clave de la abundancia. Para tener una buena vida es necesario estar en constante dar y recibir.
- Satisfacción con la vida: los humanos por naturaleza siempre nos quejamos de cualquier cosa, pero para tener abundancia emocional es necesario modificar nuestros pensamientos para poder mantener una actitud positiva ante la vida y ante las dificultades que se nos interponen. Debemos mantener una relación cordial y de satisfacción ante lo que hacemos a diario.